ENVIDIA DE LA BUENA!

Como una bitácora de capitán,
se escribía paso a paso,
puerto a puerto,
en letras y retratos,
en páginas distintas,
lo mismo que si era igual,
la historia de una Travesía,
que solo inspiraba a quien escribe,
envidia de la buena!...

Un recorrido por el primer continente,
narrado por un lado,
estampado en marcos digitales por otro,
pero al unísono,
por separado,
siempre cantado,
el diario compartido de aquella Travesía,
que hidrata mi piel reseca,
con envidia de la buena!...

No sé con exactitud,
cuántos muelles visitaron,
cuántos corazones acariciaron,
cuántas horas descansaron,
ni cuántos poemas cantaron…
solo sé donde empezaron
y como terminaron…

Con envidia de la buena!,
nos llevaron por Tenerife,
hablando catalán en Barcelona,
mientras la torre Eiffel,
se convertía en la estrella del norte,
bajo la luna de un idioma no descifrado,
en una ciudad desarrollada,
dejándonos aquí anonadados,
con envidia de la buena!...

Amigos, hermanos, conocidos y desconocidos,
unidos todos en la misma Travesía,
a ritmo de bachatas color de rosa,
escoltados de avispas angelicales,
marchaban los soldados al compás de los dinteles,
armados con las llaves de nuestros corazones,
derramaban su mensaje,
que es el nuestro,
en tierras lejanas,
bajo el sol de oriente,
una Travesía que solo nos llena,
a todos los que la entendimos,
con envidia de la buena!...

Galop./
30/Sept./2008