Saturday, June 07, 2014

La Brisa que no Sopla, las Lágrimas que no Corren...

Los poetas siempre hablamos,
sobre el regocijo de sentir la brisa acariciar nuestros rostros,
cerrar los ojos,
rejuvenecer con sus caricias,
percibir la sensación agradable del cambio que simboliza,
desnudarse ante su paso…

Hoy comparto la brisa que no sopla…

Cuando estamos llenos de sentimientos,
dolor, felicidad, angustia, rabia, desamor…
lloramos para liberar los mismos,
dejamos correr ríos de lágrimas por nuestras mejillas
para sacar de nuestro adentro esos sentimientos
y dejarlos aflorar en el desierto de nuestro corazón,
tratamos de mantenerlo hidratado y latente y esperamos un soplo de brisa…
hoy padezco de sequía…

Por las lágrimas que no corren…

¿Cómo interpreta el poeta esta sensación sin contradecir lo siempre escrito?,
¿cómo cambia los trazos de su espada en dirección a sí mismo?,
¿cómo logra un poeta convertirse en mortal?...

Haciéndolo!...

Los versos, las frases, los sueños que se quedan en sueños,
las falsas promesas, los cambios que nunca vendrán,
le pertenecen a los soñadores dormidos,
los que nunca van a despertar…

Pero los hechos, los sacrificios, las acciones,
el adiós a los malos hábitos que te mantienen durmiendo,
son los pasos que nos devuelven nuestra aura de mortales,
a aquellos que queremos seguir soñando,
pero con los ojos abiertos,
queremos ver lo que las nubes de nuestro subconsciente,
le ocultaban al consciente somnoliente,
queremos vivir, queremos hacer, queremos compartir...
con aquella musa que nunca fue parte de tus sueños,
sino de tu realidad!...

Hoy me siento entre estas cuatro paredes
y aunque veo los árboles bailar a través de la ventana,
la brisa ignora mi presencia,
hoy que mis lágrimas me dan la espalda,
muere el poeta y nace el mortal,
no quiero caricias nuevas que perfilan cambios,
no quiero sacar de mi los sentimientos que me llenan,
quiero despertar,
quiero demostrarte con los ojos abiertos,
que mi sueño es tu sonrisa alegre,
que mi felicidad es hacerte feliz,
hoy quiero que compartas conmigo,
la brisa que no sopla, las lágrimas que no corren…

Galop./
7 de junio, 2014